Autor: Cesar Vallejo
H
ay golpes en la vida,
tan fuertes Yo no sé!
Golpes como del odio de Dios;
como si ante ellos,
la resaca de todo lo sufrido
se empozara en el alma
..............Yo no sé!
Son pocos; pero son
Abren zanjas oscuras
en el rostro más fiero
y en el lomo más fuerte.
Serán talvez los potros de bárbaros atilas;
o los heraldos negros
que nos manda la Muerte.
Son las caídas hondas
de los Cristos del alma,
de alguna fe adorable
que el Destino blasfema.
Esos golpes sangrientos
son las crepitaciones de algún pan
que en la puerta del horno se nos quema
Y el hombre Pobre pobre!
Vuelve los ojos,
como cuando por sobre el hombro
nos llama una palmada;
vuelve los ojos locos, y todo lo vivido
se empoza, como charco de culpa,
en la mirada.
Hay golpes en la vida,
tan fuertes Yo no sé!